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viernes, 4 de julio de 2008

Despedida de una Utopía

Mi queridos oyentes. Voy a narrarles una historia. Una historia muy antigua, semiolvidada en el tiempo, de la que tan solo se recuerdan pequeños fragmentos, sesgados, distorsionados...

Es una historia de grandes gestas, de valerosos caballeros, de tiempos de gloria. Es complicado saber cual fue su principio, es muy difícil discernir cuales fueron los causantes de tal prosperidad, pero como todas las historias tienen su final, y aunque como ocurre en las grandes historias, en esta, por el contrario su final aun no ha sido escrito.

La historia normalmente la escriben los vencedores, es su voz la que se escucha mas fuerte, su punto de vista es el que se hace valer y prevalecer, pero en este caso, hasta ese aspecto es dudoso en nuestra historia.

Me es grato, grandes señores, hablarles de, la desaparecida en los anales de la historia, la mítica CALIBUR.

Esta historia no es leyenda, aunque sus vagos recuerdos así se hayan transmitido de generación en generación. CALIBUR existió, fue real. Puede que muchos lo duden, pero no es así. Yo mismo pude comprobarlo, yo mismo viví y conviví en semejante alianza, y mi corazón aun está partido por su añoranza, su recuerdo y nostalgia.

Calibur fué la más grande y gloriosa alianza que pudo presenciarse en este vasto mundo conocido como Server 7. Surgió en tiempos de prosperidad y gloria, fundado por grandes señores que garantizaron un estado de bienestar y prosperidad a sus habitantes que rivalizó con la desaparecida Atlantis y con el esplendor del Peloponeso.

Allí vivieron y gobernaron grandes nobles:

Stego, el gran caballero. Artífice y motor de semejante prodigio, que hace sombra al mismisimo Arturo Pendragón.

Van, gloriosa reclutadora. Fuera como una tigresa y dulce como el almivar.

Pitagoras, el gran caballero, grande entre los grandes y duro como el acero.

Jaitower, el eterno vigía. Siempre atento, siempre despierto, guardando la tranquilidad para toda la población.

Bitelchus, el gran peregrino

Sygate, el agresivo transgresor, el gran oraculo y mejor estratega.

Sergi Vencedor, un fiera de los números, y mejor estratega, que otorgaba protección a los menos precavidos.

Se que a muchos olvido en el camino, pero tantos fueron aquellos gloriosos personajes, que sería imposible contar su historia.


Ocurre en todas las civilizaciones que han convivido a lo largo de la historia, tienen su nacimiento, su apogeo y declive. Es ley de vida. Muchos son los hechos, las causas de las subidas y bajadas de una civilización, y en muchos casos imposibles de atisbar viviendolo desde dentro, ya que esta situación, este punto de vista,, nubla la visión e impide ser objetivo, pero no vamos a centrarnos en este aspecto mis queridos oyentes. Vamos a centrarnos en un peronajillo de esta alianza. Un personaje fuera de conexto, un hombre (porque aunque trino, era uno solo) que no estaba preparado para la rudeza de este mundo. Un hombre que vivió en una época equivocada y que a pesar de todo se sobrepuso a las circunstancias y convivió en aquella gran época de esplendor de CALIBUR. Mi historia se centrara en el Rey Azog.

Muchos nombres recibió aquel señor durante su mandato. Azog el trovador, Azog el grande, Azog el trino, el truhán, el ruiseñor, el poeta, el inconsciente, el agricultor, el filosofo... miles de nombres acunó durante su corta vida.

Presto estuvo durante su apogeo en ayudar a CALIBUR en todo lo que pudiese. Grandes momentos, mejores recuerdos que los juglares siguen recordando aunque la mayoría de poesias y cantares se perdieron en el tiempo, muchos otros detalles se recuerdan. En su momento portó el ESTANDARTE DE CALIBUR, símbolo de unidad, de camaradería, de nobleza. En aquellos tiempos, las cosechas eran tremendas, buenos los vinos y mejores las danzas.

Aun se recuerda la primera marcha de su gran ejercito en ayuda de un compañero. Un copista lo dejó grabado para la posteridad:

No puedo aportar mucho, pero mis legionarios se despiden de sus familiares y marchan a la ayuda de la alianza. "¡MUERTE Y DESTRUCCION!" gritan influidos por una furia berseker fuera de todo control posible. Marchan valerosos y sedientos de sangre aunque muchos saben que no volverán. sus familias les depiden con la cabeza bien alta y el pecho fuera gritando y señalando con orgullo: "ahi van los valientes, y uno de ellos es mi hijo!".

Marchan en formación bajo el son de los tambores y cornetas por un camino de rosas arrojadas por bellas mujeres. A lo largo de la historia serán recordados, ellos y sus familiares como los valientes que participaron en la primera gran batalla de CALIBUR.

Salud hermanos. Muerte al barbaro invasor.

Muy famoso era el grito de combate de sus tropas:

<< Oh alavados Dioses
templa nuestros brazos para la batalla
libranos de temor alguno
y despeja nuestras mentes,
dejandonos ver con claridad.

Siempre la palabra por delante,
pero sino, que hablen las armas,

aunque no tengamos esperanzas,
aunque el fin se acerque.

Mejor morir arma en mano
que viendo a nuestras familias deshonrradas,
esclavizadas y aniquiladas.

Todos a una:
¡¡ Por nuestras tierras,
por nuestros seres queridos,
por el Gran y Magnánimo Rey Azog,
por la alianza,
POR CALIBUR!!!!!!>>

Fragmento extraido de uno de tantos gritos de batalla de las tropas de Azog


Desde el momento en el que se estableció el llamado “compromiso de calibur”, podemos encontrar un fragmento rescatado de un antiguo libro de registro en el que podemos leer el siguiente escrito referente al regreso de las tropas después del combate:

La cuidad de Azog se desvive en las celebraciones y preparativos para dar la bienvenida a los valerosos guerreros que en su día partieron al compromiso de calibur. Grandes monumentos se han alzado ya prara conmemorar dicho acontecimiento.

Uno de ellos, el más llamativo, es un arco de triunfo, colocado en el porton principal de la aldea. En el, entre grandes frisos artesanales que nada tienen que envidiar a las obras clásicas se puede rezar en letras labradas en oro en la lengua bernácula de la aldea de Azog, el sanscrito:

"Mult union,
mult omnium,
mult wololoo,
mult mais ¡¡CALIBUR!! "

Traducido al castellano dice:
"POR LA UNIDAD,
POR LA GRANDEZA,
POR EL COMPROMISO.
POR SIEMPRE ¡¡CALIBUR!!"


Común era por aquel entonces entonar esta chanza:

¿Dónde vas triste peregrino?
¿Dónde vas con tu pesada carga?
¿Dónde vas con este sol vespertino?

Voy a la tierra soñada
Voy a la tierra deseada
Voy a la tierra señalada

¿Estas seguro del camino peregrino?
Tus pasos son inseguros
Tu caminar cansado
¿No deseas descansar para más tarde continuar?

Gracias por las ofrendas,
gracias por el agua y las biandas
Pero no puedo descansar,
La tierra prometida me llama,
Al final del camino me espera,
Allí descansaré, hasta que el señor me llame a su vera.

¿no buscaras fantasmas peregrino?
Utopías te llenan la cabeza
¿no habrá llamado la locura a tu puerta?

No querido señor.
Lleno de cordura camino
A CALIBUR me dirijo
Dejando atrás la barbarie,
el oscurantismo y la monotonía.
No confundas el brillo de mis ojos con locura.
Es un brillo de esperanza.
Es un brillo de orgullo y añoranza.

Voy a la tierra soñada
Voy a la tierra deseada
Voy a la tierra señalada

Aun no se sabe como sucedió, pero el declibe llamó a las puertas de CALIBUR. Poco a poco, el empuje bárbaro de las fronteras hizo mella en sus gentes. Este periodo de principio de decadencia coincidió con un acontecimiento nefasto para el Gran Azog. Asuntos personales le mantuvieron alejado de sus deberes como monarca y la desolación calló sobre sus tierras más rapidamente que sobre CALUBUR. Sus gentes se introvertieron, quedó atrás su fama de hospitalidad. Las cosechas dejaron de ser buenas, el vino se agrió y la leche se cortó. Las reses disminuián en número y sus relacciones disminuyeron drásticamente con los otros reinos.

Malos momentos fueron aquellos, pero lo peor estaba por llegar. Cuando el Trino Azog volvió poco a poco a sus dedicaciones (aunque nunca las olvido y las cuidaba todo lo que podía) se encontró unas tierras desiertas, una población menguada y una cultura deteriorada. Poco a poco comenzó a aparecer el orden y la estabilidad, pero CALIBUR no era aquella alianza soñada. Muchos eran los cambios que en ella se encontró. Allí seguían sus grandes caballeros, pero la duda marcaba sus relaciones. Todo era comprensible. Los tiempos habían cambiado y aquel sueño quedó obsoleto con los nuevos acontecimientos.

Malos tiempos para los nostálgicos, malos tiempos realmente.

Pero hay algo que siempre quedará de todo aquello. En el corazón de Azog permanecerán sus antiguos compañeros, puede que sigan dudando de él (algo normal por otra parte debido a la poca relacción que mantuvo con sus comapañeros durante un tiempo), pero en su memoria prevalecerán como dulce recuerdo, ya que ellos conocieron y vivieron lo que otros solo anhelan y lo que otros no pueden ni imaginar: la prosperidad de CALIBUR.

Seguramente para muchos esta historia, resumida al máximo suene extraña e incoherente, pero espero que para aquellos que lo vivieron, les despierte una sonrisa y recuerden aquellos momentos con tanto agrado como el mismo Azog, en sus momentos íntimos, con nostalgia, alegría y melancolía.

Por siempre,
para siempre,
fuerza CALIBUR!!!!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Siempre te tendré en mi memoria y tus escritos quedan ya para la posteridad. Grandes amigos y compañeros se hicieron en esa aventura online, de los cuales no dudes ni un instante que los tienes para cuando los necesites.

Gente como tu no se encuentra fácilmente y sería un honor volver cruzar espadas con el gran azog.

Saludos y Fuerza Calibur!!!